El vuelo directo Madrid-Guayaquil, que aterrizó en la ciudad de la costa de Ecuador el 14 de febrero, se ha convertido en objetivo prioritario para las autoridades sanitarias. El Gobierno ecuatoriano informó ayer de que en él viajaban 288 personas, que ahora están siendo localizadas para rastrear la posible propagación del virus. Las informaciones ofrecidas por Ecuador apuntan a que la mujer, de 71 años, no estaba enferma durante el vuelo y que empezó a presentar “síntomas inespecíficos” dos días después de su llegada. Su estado empeoró el pasado día 22, con un cuadro de dificultad respiratoria, y se ha ido deteriorando. Actualmente está ingresada en la UCI y su situación es “crítica”.
elpais.com/
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