El hombre que mató a su hija y seis nietos en la localidad de Bell, en el norte de Florida, había ido a prisión por matar de forma accidental a su hijo menor durante una cacería, según los registros judiciales, indican hoy medios locales.
El autor de la masacre, Don Charles Spirit, fue puesto en libertad en 2006 tras permanecer tres años en una cárcel de Florida por la muerte accidental de su hijo Kyle Spirit, de 8 años, en un caso en el que se declaró culpable de posesión de armas.
Spirit, padre y abuelo de 51 años, se suicidó este jueves tras acabar con la vida de su hija de 28 años y seis de sus nietos, que tenían entre 3 meses y 10 años de edad.
Los muertos fueron identificados como Sarah Lorraine Spirit, de 28 años; Kaleb Kuhlmann, 11; Kylie Kuhlmann, 9; Johnathon Kuhlmann, 8; Destiny Stewart, 5; Brandon Stewart, 4, y Alanna Stewart, de 3 meses, según informaron las autoridades del condado de Gilchrist, unos 50 kilómetros al oeste de Gaineville.
Spirit, quien tenía antecedentes penales, había protagonizado diversos incidentes de violencia doméstica en el pasado.
Según explicó el alguacil Robert Schult a los medios de comunicación, la policía pudo establecer diálogo con el asesino después de que tuviera lugar el tiroteo.
Sin embargo, y tras consumar la matanza, Spirit decidió acabar con su vida antes de ser atrapado por los agentes.
La ciudad de Bell está situada al norte de Florida, unos 50 kilómetros al oeste de Gainesville, y apenas cuenta con 350 habitantes.
FUENTE:
www.elnuevoherald.com
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