Cuando Donato Padilla, un mocano que había emigrado a Canadá, empezó a padecer artritis, regresó al país. Lo que pudo ser la frustración de un sueño de mejoría, lo llevó a
convertirse en el primer dominicano en patentar una invención en la
Oficina Nacional de Propiedad Industrial (ONAPI).
Seguir Leyendo diariolibre
Seguir Leyendo diariolibre
No comments:
Post a Comment