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| El cornudo VIA Richard Harbus VIA NYPOST |
Un maridito cornudo que usó la aplicación "Find My iPhone" para rastrear a su cónyuge y luego irrumpir en la casa de su amante en Rockland y los filmó desnudos en la cama juntos, fue absuelto de robo y espionaje el martes.
Sean Donis, de 37 años, lloró cuando el juez de la Corte Suprema del condado de Rockland, Kevin Russo, lo declaró inocente después de unos 20 minutos de deliberación en el juicio sin jurado.
"Solo gracias a Dios que finalmente ha terminado", dijo Donis, un florista de Clifton, NJ. "Ahora finalmente puedo respirar".
El abogado de Donis, Howard Greenberg, llegó incluso a decir que su cliente merecía ser más que absuelto en la corte..
"Debería obtener una medalla por no representar un crimen pasional cuando entró en la escena que hizo", dijo Greenberg en su declaración final.
"Al final, es un caso muy simple. ... Él comete allanamiento de morada que en la misma jurisdicción es una violación, no un crimen, y descubrió el mal mayor de su esposa haciendolo con un extraño ".
El maridito sospechoso usó la aplicación para rastrear el iPad de la familia, que su esposa, Nancy Donis, de 38 años, involuntariamente había llevado con ella a la casa de su novio Albert Lopez en abril de 2016.
Sean Donis dijo que cuando llegó a la casa de López, la puerta de entrada estaba desbloqueada, y él entró.
La fiscal Nabeela McLeod le preguntó a Donis durante el interrogatorio si tenía permiso para ingresar a la casa de López.
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| la esposa infiel |
"Defina el permiso", dijo Sean Donis. "Mi esposa estaba allí. Llamé al timbre y llamé a la puerta. Ella podría haber sido secuestrada, nunca se sabe ".
McLeod respondió: "Pero dijiste que querías atraparla. Sentiste que tenías el derecho ".
Donis respondió: "Si mi esposa no estuviera allí, no habría entrado".
Entró en el dormitorio principal apenas iluminado de López para encontrar a su esposa y su jefe desnudos en la cama, y comenzó a filmarlos con su teléfono celular.
López testificó el viernes que estaba aterrorizado de lo que Donis haría en ese momento. McLeod dijo en su declaración final que el marido despreciado "quería avergonzar, humillar y degradar a [la pareja] tanto como fuera posible".
Pero en su declaración final, Greenberg ofreció algunos consejos de sentido común para contrarrestar esa noción, diciendo: "No puedes tener demasiado miedo si cojes a la esposa de otro hombre".
"Cuando te involucras en el adulterio, asumes el riesgo y consientes en estar expuesto", argumentó el abogado..........Seguir leyendo nypost.com
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